28 de mayo de 2016

Me quedo aquí.

Hoy me quede escondidita, jugando con vuestro pelo, para que salir si tengo todo aquí!
Hoy prefiero tu piel y la tranquilidad de mi salón, en revuelo por juguetes y risas, por los saltos en el aire y las carreras que parten de la cocina.
Me quedo consolando tu llanto, tus pequeños enfados, prefiero comerte a besos sin mirar hacia fuera.
Porque para que salir si tengo todo aquí.
Cuando miro vuestras caritas acariciando vuestras sonrisas, sintiendo todo, sintiendo tanto, el tiempo desaparece en ese instante en el que me dejo llevar por ustedes, por los compañeros de vida que me acompañan arrugando las sábanas y rompiendo juguetes.
Me encanta saborear vuestros momentos, me fascina ver como arrastras las macetas para que yo pueda barrer el patio, lleno de flores de colores, lleno de sol y agua.
Hoy me quede aquí, solucionando los problemas que se forjan en las furiosas luchas de patio de vecindario donde se enlazan las primeras amistades de la vida.
Cada instante merece la pena vivirlo con ustedes, cada momento que para el tiempo, cada segundo elijo vuestra piel, vuestras caricias, vuestro pelo, las risas, los escondites, y las siestas, esas siestas donde nunca te duermes porque jugamos a que te rescato porque debajo de las sábanas hay magia. Miento, al final te sueles dormir entre la música de mi corazón que tanto te gusta escuchar, y agarrando mi brazo porque dices que esta más fresquito.
Saboreo cada gota de agua que salpica de la hora de vuestro baño, donde se esconde un océano entero de juguetes que cobran vida y viven sus propias historias hasta que la voz de vuestra madre dice niños vamos que hay que cenar, rompiendo vuestro juego.
Me encanta esconderme dentro de ti, el hombre más especial de mi vida, me encanta bailar al son de tu corazón, sentirme protegida y protegerte, cuidar de estos señores pequeños que nos ha tocado tener.
Hoy me quedo aquí mirando sus ojos, cada color, dada detalle de sus rostros, sintiendo lo que sentimos entre nosotros que es tan grande e infinito que no se puede definir aquí.
Me siento dichosa por los enfados, de ahí las mejores reconciliaciones, donde cada vez resurge más amor, dichosa por los besos, por ser tu consentida. Dichosa cuando entro por la puerta y sigues eligiendo vivir esta vida conmigo.
Vivo profundamente cada centímetro de nuestras vidas, aunque a veces parezca ausente.
Un superhéroe se acerco a decirme que me amaba, otro, más pequeño me dijo que me quería, y una superheroína más pequeña todavía salvo mi corazón diciéndome que siempre me cuidaría.


Prefiero quedarme aquí, hoy, si.

No hay comentarios:

Nada ocurre por casualidad.

FAVORITO

CONCIENCIA CRÍTICA

espana123.com

Búsquedas locales en España